A la hora de comprar un inmueble, te encontrarás con todo tipo de oportunidades, ya sean propiedades nuevas a estrenar o también de reventa o segunda mano. Pero, ¿qué es mejor? ¿Qué operación resulta más rentable? 

En Fincas Olivares, administradores con más de 100 años de experiencia en el sector inmobiliario, ¡lo analizamos! 

Vivienda nueva o de reventa en el mercado: ¿qué es mejor?

Si planeas adquirir un inmueble, es posible que tengas dudas sobre si comprarlo nuevo o de segunda mano. Es una duda frecuente y la mejor elección depende de una serie de factores, principalmente de las preferencias y necesidades del comprador. 

A continuación analizamos los principales motivos para elegir un tipo de operación u otra, en función de tu situación.

¿Qué ventajas e inconvenientes presentan las viviendas nuevas?

Principalmente, la obra nueva destaca por ofrecer una certificación energética más alta, un mejor aislamiento, una mejor iluminación y, en algunos casos, sistemas de domótica para disfrutar de un hogar más conectado e inteligente. 

Además, dentro de la obra nueva, hay viviendas en urbanizaciones que a menudo incluyen otras comodidades extra como piscinas y áreas verdes. Son esas “pequeñas cosas” que pueden hacer que la experiencia sea muy premium.

Sin embargo, estos inmuebles tienden a ser más caros. Al tratarse de una obra nueva y con todas las comodidades, lista para entrar a vivir, se paga un precio superior a una vivienda de reventa que ya ha sido usada.

También está el inconveniente de tener que comprar sobre plano, lo que implica tener que pagar un alquiler durante varios años, mientras se construye. Este gasto también hay que tenerlo en cuenta a la hora de analizar si la operación es rentable.

En materia fiscal, las viviendas de obra nueva están sujetas al Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA) -que es del 10% para toda España- y al Impuesto sobre Actos Jurídicos Documentados (AJD).

¿Qué ventajas e inconvenientes tiene la vivienda usada?

La gran ventaja de la vivienda de segunda mano, es el precio. Siempre va a ser mucho más económica que la vivienda nueva. Aunque ojo, también entra en juego otro factor muy importante: la ubicación.

Gracias a la vivienda de segunda mano es posible vivir en las mejores zonas de la ciudad. Si quieres invertir en una ubicación céntrica, eso prácticamente te obliga a invertir en una vivienda utilizada, dado que la obra nueva se suele instalar en las afueras. 

Si te interesa vivir en una zona que esté bien comunicada, sin duda es una muy buena inversión. Además, el centro es el centro. ¡No se va a mover! Con lo cual los precios en las buenas zonas sólo pueden ir en una dirección, y es hacia arriba.

No obstante, el inconveniente de la vivienda de segunda mano es que puede necesitar reformas importantes. Además, tampoco tienen la eficiencia energética de las nuevas construcciones, lo que implica también una serie de gastos. 

También es cierto que en la vivienda de segunda mano puedes hacer reformas y ponerla completamente a tu gusto, lo cual es un punto a favor. Aunque, si lo prefieres, también puedes encontrar en el mercado opciones listas para entrar a vivir.

En tema de impuestos, en la vivienda de segunda mano se paga el Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales (ITP). En general, es entre el 3 y el 10%, por lo que es importante consultarlo para cada comunidad autónoma en concreto y también las posibles bonificaciones en función de la edad y los ingresos.

Conclusiones

Como ves, tanto la vivienda de obra nueva como la usada presenta sus pros y contras. Al final, depende mucho de la idea que tenga el comprador.

Si no quieres obras, puedes comprar una vivienda de segunda mano reformada o una de obra nueva. Mientras que si quieres ponerlo a tu gusto, siempre es mejor usada.

Y tú, ¿qué eliges y por qué? Si aún tienes dudas de cuál es la mejor opción para ti, no dudes en contactar con nuestro equipo de administradores de fincas y te ayudaremos sin problema. En Fincas Olivares estamos a tu lado durante todo el proceso inmobiliario.